lunes, 11 de julio de 2011

También a las bombillas se les apaga la luz.

"Cerebelo" viene del Griego "Cere" (Poder) y el Latín "Bellum" (Verlo). Poder Verlo. 
El Cerebelo se encarga de que los ojos puedan ver, claro, porque como esté la luz apagada no ves una puta mierda y vas por casa pegándote golpes con todo joder que te pones insoportable cuando vuelves borracho y me pegas.

Pues sí… es curioso. También a las bombillas se les apaga la luz. Ni siquiera la mejor de las bombillas fabricada por el hombre puede durar eternamente. 
¿Cuánto vive una bombilla? 
Es algo un poco difícil de determinar, algunas se funden y no tienen ni un año, y otras ni te acuerdas de cuándo fue la última vez que las cambiaste. Pero de todas a todas una bombilla es como tener cualquier mascota que no sea un galápago: Va a vivir menos que tú. Va a llegar el día en que la palme y tengas que cambiarla por otra. Naces predestinado a experimentar su muerte. Superar la muerte de tus bombillas fortalecerá tu carácter (y el bolsillo de Osram). Lo que no es normal es lo de los Americanos, como  lo que sigue; está pasando en la ciudad de Livermore, California.

La bombilla más longeva del mundo lleva 110 años encendida. Lleva funcionando desde el año 1901, año en el que fue colocada en una estación local de bomberos. Flipa con la bulba raquídea luminosa…

La bombilla de la discordia

Como veis, no todo el monte es orgasmo. Hay una bombilla por ahí del año en el que Tesla tuvo un grano que sigue dando a luz y nunca tuvo hijos... qué gran chiste, qué infancia infravalorada...

La bombilla cuenta con un filamento de carbono, aislado completamente por una esfera de vidrio y opera al vacío (no sé muy bien qué quiere decir esto). Además, consume sólo 4 vatios. Esto se explica porque vistas las imágenes creo que está claro que esta bombilla está ahí para darse luz a sí misma, porque para iluminar otra cosa ya no le da.

En California se ve que son muy viscerales con la muerte de sus bombillas y entonces este curioso vestigio del pasado es considerado por los ciudadanos como una de las más importantes atracciones turísticas de la ciudad. Todo el mundo quiere ver la bombilla que sigue funcionando más de un siglo después. Ya han empezado a sacar merchandising de la bombilla y hay quien apunta el guión de una nueva película: "El curioso caso de Bombíllamen Button".


Mira, mira cuánta vida!!! Hágase la tú!! Guapa!!

En el cuerpo de bomberos de Livermore están contentísimos y se muestran agraciados de tan dispar regalía. Tal es el ambiente glorificador que rodea a la bombilla que desde el cuerpo se ha propuesto sustituir el anual calendario de los bomberos para recaudar fondos por un calendario repleto de sugerentes fotos de bombillas en luces menores. Así lo explicaba Henry Bullock Emeadicho, máximo responsable del parque:

"Ya pensábamos hacer un calendario original, porque siempre salir en el calendario con tangas de la bandera de los USA ya está demasiado visto, además con ese tanga se te clavan las estrellas de la tira que te surca el hojaldre. Pero de repente surgió la posibilidad de forrarnos de pasta a costa de un simple objeto viejo y joder, tuve una idea, se me encendió la bombilla... je je je je je... cómo soy... je je je je... soy de traca."

Como pianos, chorradas como pianos.

En la página web oficial de la bombilla (www.centennialbulb.org) podrás ver una foto de la bombilla que se actualiza cada 10 segundos. Si la asustas y consigues que se apague los bomberos han jurado sobre la biblia matar a toda tu familia y a un amigo tuyo al azar. Pero también hay un millonario que se aburre que ofrece un millón de dólares por verla muerta. Lime and sand, cal y arena. 

This is América, qué te esperabas...


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