viernes, 28 de diciembre de 2012

Carta abierta a Facebook

     Facebook, tengo que confesarte una cosa: España no está en América de Sur. 

Donde ellos (y vosotros) decís "hace 45 minutos a través de su celular" nosotros decimos "hace 45 minutos a través de su móvil". 


   Que tampoco es relevante, ni mejor ni peor, pero a vosotros bien que os jode que lleguemos a los USA pidiendo "trousers" y no "pants", o directamente "jeans", así que haced el favor de adaptaros de una puta vez a la idiosincrasia y costumbres del consumidor. 


   Yo quiero un Facebook back in the eighties-nineties en España, que use expresiones del tipo "Qué pasa, Tomasa?", "Tú de qué vas de bitter kas", "La cagaste Burt Lancaster", "Hasta luego lucas", "Hola soy Edu feliz navidad", "Cuidado con Paloma que me han dicho que es de goma", "Hola Radiola cazador sin pistola", "Esto es tope guay", "con mucha marcha", "vámonos de guateque"...


Cuando hayas hecho algo al respecto, te habrás ganado mis respetos.
Mientras tanto, andáte a la remil puta que te parió, Caralibro!

=)


jueves, 27 de diciembre de 2012

Reflexiones (I)

     Creer en el destino es como creer en Dios. No puedes demostrarlo, ni tan siquiera puedes verlo. Sólo crees en ello porque quieres creerlo. Porque no te cuadra de otra forma, no te tiene sentido, al puzzle le faltarían piezas de otro modo.

     Pero si tan efímero es lo uno como lo otro, que exista gente que niegue la existencia de ningún Dios, pero sin embargo crea en el destino, esto es: que todos estamos predestinados a ser quien somos, a acabar como acabemos, a vivir una película que ya está escrita en algún sitio, es... es raro. 

     Personalmente, si me apuntasen con un Facebook y me obligasen a dar mi opinión al respecto, diría que creo que esa gente que no cree en Dios pero sí cree en el destino es... sospechosa de ser inteligente. Pero sólo sospechosa. Quizá al final de todo, y como pista del destino, todos nosotros sólo seamos un sueño de Resines...




Reflexiones absurdas de un 27 de Diciembre, f*ck you, Mayas!